En el mundo actual, con la gran incidencia que tiene sobre nuestra vida personal y profesional lo que mostramos en Internet se hace necesario cuidar lo que escribimos y exponemos, sin apartarnos nunca de la intención (ser polémico o escribir con palabras mal sonantes no tiene que ser necesariamente algo malo) pues marca nuestro objetivo final.
Otra competencia importante para que las redes sociales nos ayuden a crecer es ser proactivo y atrevido, echarle cara como se dice, tener y dar una opinión y no solo apropiarnos de lo que ya se ha escrito anteriormente, sin miedo pero con inteligencia, recordando siempre el fin que buscamos. Con esto conseguimos no solo saber y ampliar conocimientos sino mostrar que sabemos, la forma en la que lo comunicamos es realmente importante, así existen personas que sabiendo menos e incluso plasmando ideas de otras personas tienen una repercusión mayor a otros que son auténticos cracks en la misma materia y no han sabido aprovecharse, nosotros sabemos lo que sabemos pero es crucial que los demás también lo sepan, el aparentar aunque cueste reconocerlo es cada vez más necesario, sobre todo para el ámbito profesional.
En las redes sociales tenemos la misma capacidad y potencia que cualquiera, el hecho de que alguien tenga más seguidores solo significa que potencialmente lo debe leer más personas, pero nada más. Los contenidos que escribimos nos definen.
La iniciativa es otro aspecto en el que fallamos mucho, podemos aprovechar las redes sociales para actuar. Buscar lo que queremos e ir a por ello, si vemos una necesidad sin cubrir y nos vemos capaces de hacerlo hay que lanzarse, y debemos hacerlo aunque el resto no lo vea, nadie te conoce mejor que tu mismo y no te amilanes por la competencia, aunque la apariencia es importante tarde o temprano el conocimiento y la actitud se impone, siempre y cuando, como es lógico, se intente.
Publicítate, conecta, opina, participa, colabora, promociónate. Con ello debemos conseguir en las redes sociales profesionales lo que buscamos: Visibilidad: